En esta ocasión vamos a hablar sobre la placa bacteriana, y habrás escuchado, sobre todo en nuestro blog que es muy importante mantener una buena higiene bucodental para proteger nuestros dientes de la molesta placa dental.
Lo que igual no sabias es de que se trata exactamente, cómo prevenirla y los muchos problemas que puede ocasionar, ya que es considerada como una de las causas más importantes en la aparición de caries y otras enfermedades periodontales.
¿Quieres saber más? Pues lee nuestra entrada hasta el final para enterarte de todos los detalles.
¿Qué es la placa bacteriana?
Entendemos por placa bacteriana la acumulación de microorganismos adheridos sobre la superficie oral formando una película incolora y pegajosa. En definitiva, podemos decir que la placa bacteriana es una película gelatinosa que se adhiere fuertemente a los dientes y superficies blandas de la cavidad bucal. Cuando no se retira a tiempo, comienza a endurecerse y fijarse fuertemente a la superficie dental, formando el sarro.
Mientras comemos o dormimos se forma constantemente placa bacteriana, de ahí la importancia de cepillarse los dientes después de cada comida y, sobre todo, antes de acostarse. No hacerlo convierte la placa bacteriana en una de las principales causas de enfermedad oral. Su presencia en la cavidad bucal está directamente relacionada con la aparición de enfermedades como la gingivitis, periodontitis o las caries.
Podemos encontrar tres tipos:
- Placa marginal: placas acumuladas sobre la superficie del diente.
- Placa supragingival: localizada en zonas de estancamiento. como el margen gingival.
- Placa subgingival: localizada en las fosas del surco gingival y a las bolsas periodontales.
Cómo nos afecta
Debido a la proliferación de bacterias, la placa bacteriana es una sustancia ácida que causa daños en la capa exterior que cubre y protege el diente y agentes externos (esmalte) dejando así desprotegida la dentina (parte blanda del diente). A su vez, la acumulación de placa bacteriana también afecta a nuestras encías provocando un hinchazón y sangrado conocido como gingivitis. Esta enfermedad periodontal afecta en sus primeras fases al tejido gingival inflamándolo. No obstante, si el paciente no se somete a ningún tratamiento y se permite desarrollarse a la enfermedad, ésta desembocará en una periodontitis que afecta a los tejidos más profundos del diente, destruyendo el sus soportes y provocando que éstos comiencen a moverse corriendo riesgo de caída.
Cómo evitar la placa dental bacteriana
Como es de suponer, la mejor forma para combatir la placa bacteriana es llevar una correcta higiene dental en tu día a día. Esto conlleva cepillarse los dientes después de cada comida y utilizar un dentífrico adecuado. Cuanto más efectivo sea el cepillado dental más tardará en hacer aparición la placa. También es aconsejable acompañar el cepillado con el uso de hilo dental para llegar a aquellas zonas a las que el cepillado convencional no puede acceder.
La superficie de la lengua es un área propicia para la acumulación de bacterias, por lo que es importante también limpiar la lengua con cada cepillado.
Como complemento al cepillado podemos destacar el uso del irrigador dental, cuya función de barrido interdental con agua prevenir la acumulación de placa en la boca. Se debe tener muy en cuenta que el irrigador funciona como un complemento al cepillado y nunca como un sustitutivo.
Evitar alimentos azucarados o ácidos nos ayudará a llevar unos buenos hábitos alimenticios, previniendo un exceso de placa bacteriana.
Por último, no podemos dejar pasar la importancia de la visita al dentista al menos una vez al año. La placa bacteriana y el sarro no son siempre perceptibles a simple vista por que una exploración a fondo por parte de un profesional es muy recomendable y nos ayudará a detectar posibles problemas a tiempo.
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